Es fácil pensar que solo las grandes empresas pueden tener un gran impacto en las comunidades y que si tenemos un pequeño emprendimiento o negocio, éste no tendrá mayor relevancia en la comunidad y en la sociedad en general, pero en realidad, esta es una noción bastante equivocada.

Los pequeños emprendimientos no solo aportan a una comunidad, sino que muchas veces se convierten en uno de los pilares fundamentales para su progreso.

Veamos 5 razones básicas, pero poderosas, por las que los pequeños negocios contribuyen al desarrollo económico y social de una comunidad:

  1. Ayudan a su bienestar económico: Cuando creamos una empresa, tenemos que comprar insumos, pagar por servicios específicos, en algunos casos contratar personal y en otros casos pagar impuestos. Todos estos factores hacen que la economía se mueva de forma más fluida y haya más dinero circulando en la comunidad.
  2. Generan empleos locales: Partiendo del punto anterior, en la medida en que los pequeños emprendimientos crecen, se abren nuevas posibilidades para generar empleos a las personas de la misma comunidad, lo que mejora su calidad de vida al no tener que salir de su entorno, ni desplazarse grandes distancias para poder emplearse.
  3. Inspiran a otros potenciales emprendedores: Si a un negocio le va bien, otras personas de la comunidad se sentirán motivadas a iniciar un negocio propio.
  4. Pueden contribuir a mejorar el medio ambiente: Al crear una economía más local, las personas tendrán que desplazarse menos en automóviles y servicio público para encontrar lo que necesitan, lo que fomenta una menor contaminación ambiental. Por otro lado, los pequeños negocios necesitan de menos infraestructura, lo que también contribuye al mismo fin.
  5. Crean y reafirman lazos entre los miembros de una comunidad: Los pequeños emprendimientos, al ser atendidos mayoritariamente por sus dueños, son mucho más cercanos y ayudan a generar dinámicas sociales que fortalecen las relaciones de comunidad.

Como vemos, el aporte a la comunidad de las pequeñas y medianas empresas no son una cosa menor, sin embargo, como emprendedores podemos sumar algunas acciones adicionales simples, que harán que el impacto de nuestro negocio sea cada vez más grande:

  • Implementar en nuestro negocio prácticas de ahorro de recursos
  • Contratar preferiblemente personas de la misma comunidad
  • Tratar de innovar en nuestras prácticas y procesos para apoyar el progreso de la comunidad
  • Competir de forma leal y apoyarse mutuamente para crear redes de emprendedores
  • Invertir una parte de nuestras ganancias en programas sociales o ambientales que mejoren la calidad de vida de nuestra comunidad.

Nuestros pequeños negocios o emprendimientos pueden contribuir más a la comunidad de lo que quizá imaginábamos y cada pequeña cosa que hagamos por llevarlo más lejos, será también un aporte más a nuestra comunidad.

Conozca las alternativas que EDESA le brinda a los emprendedores para seguir creciendo y construyendo una sociedad mejor.